Después de una anticipada promoción, por parte de Best Picture System al fin el viernes 25 de febrero estrenaron en cines comerciales la comedia guatemalteca Puro Mula.
La trama es sencilla: un vago es sorprendido por su hermana una mañana de goma obligándole a cuidar a su sobrino, el niño se escapa y ahí comienza todo.
Aún para alguien que no haya visto el tráiler o conocido algo de la producción de antemano es inesperadamente graciosa, la sucesión de eventos es cómica en muchos sentidos y niveles, los personajes son naturales y parecen sacados de nuestros propios barrios citadinos. El lenguaje es excelente, la fluidez con que salen las “malas palabras” es genial por parte de todos los personajes, naturales como las usamos y oímos todos los días, a diferencia de otras películas donde se pretende ofender o impresionar con el vocabulario soez, aquí simplemente refleja la verdadera forma de ser del guatemalteco, un gran atino.
Lo mejor de toda la película es la actuación del personaje principal, Joel Fonseca (Domingo Lemus) sostiene el ritmo durante todo el film, actúa excepcionalmente bien, no es fácil hacer un personaje cómico y mucho menos hacer reír, además le imprime al personaje todo el carácter necesario para hacerlo prácticamente real.
Luego vienen otros personajes memorables, clásicos en todo barrio chapín, el tendero, los niños, el viejo cascarrabias, el policía, la pareja disfuncional, todos bien trabajados. El punto más débil de la película y el guión son, lastimosamente, el sobrino de Joel, del cual ni siquiera sabemos su nombre, permanece en silencio en casi todas sus apariciones y no se redondea el personaje por lo que por momentos puede pasar como utilería para el propio Joel. El otro cabo suelto son los villanos, un trío de bravucones “mamados” que intimidan al barrio solo con caminar por la calle, aunque la idea es buena y puede funcionar para comedia, no dejan de sobrar por su poquísima importancia en la trama, fácilmente se les puede eliminar y dejaría el resto prácticamente intacto.
Es agradable ver a Guatemala reflejada de esta forma, auto-burlona según lo veo, en la pantalla grande, con una buena idea, buena ejecución, y sobre todo con talento que se nota en la dirección, actuación, sonido y edición. Esta película se convierte en un nuevo favorito del cine nacional, porque la comedia vale la pena cuando no es humor de golpes en la ingle y pedos como el que nos tratan de vender en Hollywood, la comedia es un género tan difícil y meritorio como cualquier otro, y este es un ejemplo de ello.
la crítica esta aceptable, pero lo que no esta bien el final de la pelicula, se esperaba algo mejor. YO esperaba un mejor mensaje, otro desenlace... que al final joel cambiara y se hiciera una mejor persona. y al final la peli nos dejo igual como empezo, "puros mulas" esperando...
ResponderEliminarEl final igual me parece muy débil. Yo prefiero peliculas que no pretenden dejar un mensaje y que la interpretación sea a juicio personal, prefiero un final impactante, patético o incomodo, pero para llegar a un final así se tiene que amarrar en el momento preciso... eso no pasó en Puro Mula, pero el resto de los aprox. 100 minutos de película, bien valen la pena. Gracias por el comentario.
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